jueves, 19 de noviembre de 2020

Siempre Adelante

 


Queridísimo tío Angel,

Hoy hace una semana que hablé contigo. Tenía el deseo de comentarte mi cambio de trabajo y a pesar de sentir tu voz rara no fui capaz de detectar que ya te estabas despidiendo de esta vida. Aun así me quedo con tu frase: “hija siempre adelante en este trabajo o en el que te toque”.

Siempre adelante es lo que les ha quedado a tus parroquianos de Pulpí. Han sido tantas las muestras de afecto que hemos recibido estando allí que no puedo por menos de ponerlas en estas líneas.

Siempre adelante y por eso dijiste tu misa habitual a las 7 de la tarde hasta la víspera de tu muerte y tuviste un espíritu de servicio con esta iglesia hasta el final.

Siempre adelante con las Romerías, los Caminos de Santiago, la Coral, las cofradías, la revista y un sinfín de iniciativas que yo seguro no me llego a imaginar.

Siempre adelante le decías a aquella nenica que lloraba a moco tendido tu féretro recordando como la habías acompañado en la realidad de su vida plagada de muerte y sufrimiento.

Siempre adelante les queda a esas personas que las ha asistido desde su Confirmación al sacramento del matrimonio, incluso alguna me dijo que habías casado a alguno de sus hijos.

Cuanto te ha querido la gente. No puedo por menos de mencionar aquí a Berna y Aurelia y a muchos y muchas que quedan en el anonimato y que solo tú lo sabes como las chicas del supermercado Covirán, la farmacia que frecuentabas, Zafiro Tours, el chino , el quiosco y los  bares donde estilabas esa fanta y los helados que tanto te gustaban.

La iglesia de Pulpí te ha respetado en tu forma de vivir, LIBRE  .Así lo mencionó el Señor Obispo en la homilía de tu despedida.

También quiero mencionar  al Padre Alberto, Albertito como te referías  que te atendió en tus ultimas horas y que sabía que  este verano habías venido a Tornadizos para despedirte y por eso traías un montón de recuerdos de afecto de las parroquias por las que habías pasado.

Siempre adelante y aunque se nos quebrara la voz te despedimos con la Salve Rociera que te encantaba cantar y que nos aprendimos verano tras verano en Tornadizos.

Siempre adelante para casar, bautizar y enterrar a tu familia y a mi querido padre aunque se te partiera el corazón al hacerlo.

Siempre adelante bailando sevillanas delante de la iglesia de Pulpí como me contaban tus amigas que recordaban los años de la Coral como una de las mejores épocas de sus vidas.

Siempre adelante para coger tu testigo y transmitir la alegría de la fe a los que tenemos al lado porque si hoy nos amamos es que RESUCITÓ.

 

 

sábado, 7 de noviembre de 2020

Ha sido un placer amig@s!!

 


De repente veo un número largo en mi teléfono silenciado, uno de esos que uno sabe que son de cualquier administración. Ya eran las dos y a pesar de que tenía una persona en el despacho, lo descolgué.

-¿Es usted fulanita?

-Sí, respondí.

Yo con el corazón en un puño y continuó la voz: ¿acepta una sustitución por jubilación para este IES?

-No puedo decirle nada, en este momento estoy trabajando. - Supliqué que me dejara una hora y el funcionario se apiado de mí y me dijo que al día siguiente, a primera hora, me llamaría.

Me fui a mi clase habitual  y por el camino llamé a mi compañero de fatigas  con esta noticia. Apenas pudimos charlar porque salía disparado para su trabajo.

En clase me llamaron varias veces la atención porque la profe veía que no estaba atenta a las indicaciones que me daba. Al final de la misma me disculpé y le expliqué que me habían hecho una llamada que me había descolocado por completo.

Llevaba un diálogo interior de no cambiar después de una larga conversación con mi hermana. Llegué a casa, acompañé a mis hijos en sus tareas y pasé la tarde. Enseguida se hizo de noche y apareció mi marido.

Nos encerramos en la cocina y  empezamos a hablar. Empezó a desgranarme las bondades de un puesto de profesor de secundaria. Entonces me di cuenta que:

No quería dejar un trabajo conocido y más o menos previsible con algunos picos que me hacían pasar por desiertos pero que luego se ordenaban.

No quería dejar a mis compañeros y hacer otra vez un esfuerzo de adaptarme a otros nuevos.

No quería dejar unas instalaciones cuidadas.

No quería dejar mis contactos en la empresa privada en unos momentos en que es vital en el mundo profesional la prescripción de otros.

No quería dejar de disfrutar de mantener una cartera de clientes fruto de casi  12 años de trabajo.

No quería prescindir de conversaciones amables con compañeros donde la relación ya supera la cordialidad y está llena de un gran afecto.

En definitiva no quería dejar de compartir VIDA en un espacio que en general ha sido amable.

El trabajo ahora está muy ajustado; el que lo tiene debe que tener una gran disponibilidad y yo la he tenido estos años a pesar de tener tres  hijos muy pequeñitos.

Mi tarea con algunos sectores empresariales me ha permitido de primera mano conocer la problemática, la legislación que viene, las negociaciones a nivel estatal, encuentros institucionales, etc.

Son tantas cosas las que he disfrutado que no quiero por menos de plasmarlas en este escrito, que me ayudará a hacer el duelo de mí ya trabajo anterior.

Después de pasar una noche en vela, decidí que era sensato y una oportunidad que la vida me brindaba aceptar este cambio.

Acudí a la faena con el estómago encogido y traté de organizar lo mejor posible mi salida.

Después de comunicarlo a la gerencia y tener una contestación de agradecimiento por el trabajo realizado y deseo de lo mejor para el futuro, se iba despejando la nueva realidad.

Ya solo me quedaba un día y seguí trabajando con normalidad. Me despedí con un cordial buen fin de semana largo.

Ahora ya podía comunicarme con todos mis compañeros y explicarles uno a uno que había aceptado un nuevo reto con nuevas ventajas e inconvenientes.

Ha sido tremendamente satisfactoria la despedida  y quiero copiar y pegar algunas de las frases de los grupos de wasap que quedarán como recuerdo:

“Antes de que salga del grupo quiero agradecer el trabajo que ha realizado pero sobre todo el apoyo en todos los momentos mejores y peores siempre he sentido que estaba con nosotros dentro y fuera de su horario profesional .Muchas gracias María Jesús y te deseamos lo mejor”

“Muchas gracias María Jesús por todo. Por estar siempre ahí para todos nosotros y apoyar a la asociación y la federación en todo.”

“Gracias Maria Jesús, siempre dispuesta y atenta a todo. Sin ti, no hubiera sido igual .Que se cumplan tus expectativas.”

“María Jesús, gracias por todo. Tú has sido una de las personas que considero más implicadas en este proyecto”

“Y personalmente no tengo palabras para agradecerte q has estado ahí en los buenos y malos momentos con esta loca vida que nos ha tocado”

“Me alegro mucho por ti María Jesús ! Pero desde luego te voy a echar menos!! La empresa ha perdido una trabajadora estupenda, humana y gran compañera.”

He llamado a todos mis compañeros, a pesar de que esa llamada se me antojaba más apetecible  con unos que con otros. A todos quiero agradecer la compañía y la vida compartida.

Para mí solo es un punto y seguido en mi realidad profesional que se me antoja todavía larga.

Cuando he llegado al IES y he hecho la presentación y las gestiones oportunas, me han sugerido amablemente que levantara el pie del acelerador y es que, de momento, no puedo evitar llevar la impronta del mundo de la empresa.

Poco a poco me adaptaré a esta nueva etapa con mirada atenta y viviendo intensamente la realidad.